En el expediente de la causa Cuadernos consta un documento que prueba
que que las declaraciones de los supuestos arrepentidos del caso, instruido por el fiscal Carlos Stornelli y el fallecido juez Claudio Bonadio, fueron obtenidas bajo coerción. El empresario Mario Rovella consignó ante un escribano público, antes de ser indagado en la causa, que iba a decir que había pagado coimas vinculadas con obras públicas porque, si no lo hacía, sería privado de su libertad. El Tribunal Oral Federal 7 tenía el acta desde hace un año, pero recién ahora la hizo pública.